Aún hay vecinas y vecinos del barrio República que necesitan ayuda, y el comedor popular Margarita Ancacoy sigue acompañándolos y necesita donaciones, por eso el Museo de la Solidaridad Salvador Allende invita a sumarse a una campaña que busca colaborar con una de estas instancias de autogestión comunitaria surgidas en respuesta al hambre en tiempos de crisis.
A más de un año del inicio de la pandemia, los expertos comenzaron a hablar de sindemia, concepto que alude a la suma de dos o más epidemias. En otras palabras, a la expansión del virus del COVID-19 se le suman los serios efectos sobre la salud mental, que han provocado las precarizaciones y fluctuaciones a nivel económico y social.
Posibilitar redes de apoyo que ofrezcan ayuda y confort a quienes han sido más golpeados por la crisis, es un factor que los vecinos y vecinas del barrio República reconocen y están conduciendo desde distintas iniciativas. El Comedor Popular Margarita Ancacoy es una de ellas. Desde mayo de 2019, están llevando a cabo esta iniciativa solidaria, cuyo motor es el Kelluwün, concepto en mapudungún que define la ayuda entre los miembros de la comunidad como gesto de cuidado y no de caridad.
Comida y compañía
En un boletín del 17 de noviembre del 2020, la Fundación Sol mostró un cálculo aproximado de “1,9 millones de puestos de trabajo perdidos y una tasa de desempleo que alcanza el 12,9%”, en el marco de una nueva investigación titulada “Los verdaderos sueldos en Chile” en la que evidencian la realidad en que se encontraban los trabajadores antes de la pandemia; un caldo de cultivo perfecto para las consecuencias de la crisis económica que no tardó en llegar apenas comenzaron las cuarentenas y que al día de hoy siguen profundizándose.
Como una iniciativa de la Asamblea Autoconvocada del barrio República, en mayo del 2020 surgió este comedor honrando el nombre de la trabajadora del aseo de la Universidad de Chile que fue asesinada en la Avenida República hace dos años cuando de madrugada se dirigía a cumplir su turno. Primero funcionó en el sindicato SINTEC, luego en el MSSA, en Arteduca y hoy se encuentra en el sindicato de trabajadores de la Universidad Diego Portales en calle José Miguel Carrera 177.
Desde su fundación en plena pandemia han buscado distintas formas de hacerse presentes. Se consideran también una instancia política y reflexiva, y recientemente estrenan también una huerta comunitaria que abastecerá sus ollas comunes en el jardín de la Universidad de Los Lagos, ubicado en el mismo barrio. Para quienes deseen hacer donaciones de materiales, pueden comunicarse al mail huertocpma@gmail.com.
Para apoyar al comedor en forma directa hay alternativas para entregas de alimentos en los distintos centros de acopio en almacenes del barrio: Minimarket (Almirante Latorre 294 Local 3); “Los 3 ¼” (Domeyko 2150); “Emporio de la tierra” (José Miguel Carrera 408), y la Carnicería “La Principal” (Club hípico 531); almacén “Don Hirmenio” (Av. España 206 –L1); minimarket “Tentanciones” (Vergara 501) y minimarket “Estrella” (Club hípico 457). También han dispuesto una cuenta bancaria a la cual hacer depósitos que les permitan seguir adelante en su rol solidario (ver afiche adjunto).
“El gesto de compartir un almuerzo lleva implícita la posibilidad de reconocer mutuamente la dignidad, si además puedes añadir gentileza, comienzas a crear lazos”, dice Ignacia Biskupovic, encargada de Vinculación con el Territorio que ha acompañado las labores del Comedor desde sus inicios y dirige la realización de talleres con los vecinos del barrio.
Agrega que el valor de la autogestión comunitaria, está principalmente en restablecer vínculos que colaboran con la salud de las personas. “En estos tiempos de pandemia en que creo que pocos escapan a las preguntas por cómo estábamos viviendo, instancias como estas son también un lugar de prevención, son ese lugar donde las personas pueden encontrar el apoyo emocional que los cobije ante la cesantía, los fallecimientos de amigos o familiares, el miedo y también las preocupaciones respecto a los procesos que se iniciaron con el estallido social” dice.
Celebrando el Día de la Cocina Chilena, comparten unos versos para inspirar el apoyo que necesitan.
I
La Margarita Ancacoy
renace con alegría
en cada plato que voy
cocinando con rebeldía.
Ya somos un barrio unido
creciendo en soberanía
de la tierra hemos surgido
para nutrir nuestros días.
II
Dijo el choclo y el tomate
qué les gusta la Margarita
acá seguimos cocinando
y con amor la comida sale más rica.
Los zapallos vamos picando
mientras se conversa una noticia!
Y con humus y cebollitas
los domingos son una delicia.
III
Con arepas, cochayuyos
y porotos
también nos aplicamos
porque en la olla chilena
está toda América Latina.
Imágenes del comedor en su periodo MSSA (junio 2020) por Paulo Zapata.