En el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, el MSSA recuerda a cinco mujeres de su historia y que por cuyo trabajo, valentía y compromiso, hoy disfrutamos de un legado de valor patrimonial difícil de calcular; una colección internacional de arte moderno y contemporáneo en un museo de solidaridad cuyo modelo atípico se sostiene hasta hoy como el único en su tipo todavía activo en el mundo.
Sin duda son muchas más las mujeres que colaboraron desde distintas esferas y acciones en la fundación y la sobrevivencia de este museo en todas sus etapas históricas, teñidas por los colores de épocas convulsas y que tal como vemos en estos días, no hemos terminado de atravesar.
Como una manera de homenajearlas a todas, desde las más reconocidas hasta aquellas que han quedado en el anonimato, el MSSA comparte en una cronología de su historia lo que fue la participación de cinco mujeres cuyo trabajo y compromiso fueron vitales para su fundación, desarrollo, resistencia y reorganización en cada etapa de su vida. Mujeres poderosas cuyos gestos viven en el museo que tenemos hasta hoy y que con él se proyectan hacia al futuro.
María Eugenia Zamudio (sin data – 2015)
Secretaria ejecutiva del Instituto de Arte Latinoamericano (IAL) de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile entre 1968 y 1973, María Eugenia jugó un importante rol administrativo en la gestión del proyecto original del Museo de la Solidaridad. Fue clave en la labor de apoyo al Comité Ejecutivo del Museo, encabezado por el crítico de arte brasileño Mário Pedrosa y el cineasta uruguayo, Danilo Trelles.
Al comenzar la dictadura, ayudó a proteger parte de las obras del museo en clandestinidad. Cuando este se reorganizó en el exilio como Museo Internacional de la Resistencia Salvador Allende (MIRSA), formó parte de uno de sus comités de colaboración formado en Madrid, junto a Ricardo Mesa, Carmen Waugh y otros chilenos.
Al regresar del exilio, asumió la dirección de la Casa Museo Pablo Neruda en Isla Negra, al que dedicó casi veinte años.
Dore Ashton (1928 – 2017)
La figura femenina del mundo del arte internacional más importante que colaboró con el MSSA. Historiadora de arte, curadora y escritora estadounidense, fue una de las críticas más reconocidas y de mayor influencia en el mundo.
Fue miembro del Comité Internacional de Solidaridad Artística con Chile (1971-1973), encabezado por Mário Pedrosa, con quien colaboró en la formación de la Colección del Museo de la Solidaridad en sus inicios. En este rol, Dore creó los lazos con varios artistas por cuyas donaciones la incipiente institución ganó prestigio.
Recibió numerosos premios, como el Frank J. Mather de crítica de arte de la College Art Association (1963) y el premio de la Fundación Ford (1965).
María Virginia Vidal (1932 – 2016)
Periodista del diario El Siglo y autora de la columna de cultura “No solo de pan”, es a quien el museo debe buena parte del archivo de noticias de su etapa de formación. En aquellas épocas el MSSA ya enfrentaba dificultades comunicacionales; pocos medios chilenos se interesaban en sus actividades o su Colección. Virginia siguió constantemente su desarrollo.
Fue encargada de prensa del IAL desde 1971 a 1973. Tras el golpe de Estado y la muerte de su amigo Pablo Neruda, asistió a la viuda del poeta, Matilde Urrutia, en la organización de su legado hasta que en 1976 se exilió en Yugoslavia. Colaboró en Radio Moscú y luego fue su corresponsal desde Venezuela, donde también se dedicó a la crítica de arte y de literatura antes de regresar a Chile en 1987. Publicó varias novelas y escribió casi hasta sus últimos días.
Miria Contreras (1928 – 2002)
Fue parte del grupo de los principales gestores del Museo en su etapa de resistencia como MIRSA. Gracias a las relaciones que tenía en varios países del mundo, debido a sus lazos diplomáticos heredados desde la UP y a la dispersión mundial de chilenos en el exilio, pudo relacionarse con personalidades culturales y políticas influyentes en varios países de Europa y de América Latina, con quienes se crearon distintos comités para ir en apoyo del museo en su nueva etapa.
Con Mário Pedrosa en la dirección, el Secretariado General del MIRSA, fundado en París en 1975, reunió a quienes habían sido autoridades de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile y del IAL antes del golpe. Miria, asumió el secretariado ejecutivo desde La Habana, contando con el apoyo institucional de la Casa de las Américas.
La tarea principal del MIRSA además de reunir obras de arte donadas para la resistencia chilena, era organizar exposiciones para denunciar los horrores que se cometían en Chile. Miria, coordinó tanto la constitución de los diferentes comités a través del mundo, como las actividades transnacionales del museo.
Carmen Waugh (1932 – 2013)
Galerista y gestora cultural de decidido compromiso en la difusión del arte nacional y Latinoamericano, se involucró en la historia del MSSA desde su fundación. Fue encargada de relaciones del IAL entre 1968 y 1972, desde donde colaboró con Mário Pedrosa y el filósofo chileno Miguel Rojas Mix en la recepción de las obras que llegaban como donaciones para este museo en formación.
El golpe de Estado la sorprendió en Madrid desde donde trabajó en la reorganización del museo en el exilio, convocando y reuniendo nuevas donaciones para el MIRSA. Obtuvo importantes obras de artistas como Joan Miró, Víctor Vasarely, Carlos Cruz-Diez y Jesús Rafael Soto. Al mismo tiempo, desde fines de los 70 trabajó en la formación de otra colección solidaria, la del Museo de Arte Latinoamericano Julio Cortázar, en Nicaragua.
De regreso en Chile, fue directora del MSSA entre 1991 y 2005, donde encabezó la gestión del traslado de las donaciones desde el extranjero, la recuperación de las obras que quedaron en otros museos en Chile, la incorporación de artistas chilenos a la colección, la creación del inventario y la recuperación de documentos y obras que reconstruyen la memoria del museo y su Colección.