Continuando con el ciclo de la muestra Debut. 43 obras se reencuentran con su colección, este 2 de octubre, inicia la exhibición de trece nuevas obras que siguen la historia de recuperación de esta colección patrimonial en el MSSA.
La exposición Debut. 43 obras se reencuentran con su Colección, inaugurada a comienzos de este año y que celebra la recuperación de obras que estuvieron ocultas en los depósitos del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) luego del golpe de Estado, renueva su muestra continuando con el ejercicio de visibilizar estas piezas de valor patrimonial.
A las obras de Joan Miró, Eduardo Chillida, Robert Motherwell y Roberto Matta, se les unen las de artistas como María Luisa Pacheco, Rafael Bogarín y Marcelo Bonevardi, que llegaron como parte de las donaciones del fondo Armando Zegrí, cuya interesante historia como promotor del arte latinoamericano en Nueva York también se puede conocer en la exposición. También se incorporan obras de autores europeos como el artista austriaco Arnold Gross; del francés Jacques de Feline y del artista suizo y diseñador industrial Ueli Berger, cuyas donaciones fueron reunidas en las embajadas chilenas en Suiza y enviadas directamente al MNBA en 1974 por la gestión de su directora, Lily Garafulic.
Historias de recuperación
Del envío del Fondo Armando Zegrí, una de las destacadas es Dínamo (1970), obra de técnica mixta de la artista boliviana María Luisa Pacheco, quien tras sus estudios de perfeccionamiento en España y el contacto con maestros del Informalismo como Antoni Tápies, introdujo la vanguardia artística en su país a comienzos de los años cincuenta.
Esta obra, en que incorpora otra clase de materiales sobre la tela además de la pintura, presentaba el estado de deterioro más grave de todas las que se recuperaron de los depósitos del MNBA. El número de inventario que se le asignó, había sido rotulado en su reverso con un plumón cuya tinta roja había traspasado la obra. Puede verse el registro de su proceso de restauración en la sala del zócalo.
Las discusiones acerca de la amistad, un grabado (aguafuerte, aguatinta) de Arnold Gross y que resulta especialmente interesante por su técnica y el nivel de detalles de su escena, es la única de dos obras donadas por el artista que permanece en la colección del MSSA. La otra ha sido reportada como desaparecida junto a dos obras de Gérald J. Ducimetière, más conocido como John Aldus, y algunas más correspondientes al envío de Suiza reunido por el funcionario de la ONU y miembro del CISAC, Xavier Flores, y posiblemente también por el reconocido curador suizo Harald Szeemann.
Estas y otras historias de obras que siguen desaparecidas y con procesos de investigación en marcha, se pueden conocer en Debut, exposición señalada por la prensa nacional e internacional como uno de los grandes rescates patrimoniales que ha hecho el MSSA desde el retorno de la democracia.
Esta recuperación ha sido posible gracias a la colaboración del MNBA y el Centro Nacional de Conservación y Restauración (CNCR), ambos dependientes del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Puedes acceder a un registro audiovisual de este proceso aquí.
Actividades de mediación
El equipo de Mediación del MSSA, dependiente del área de Programas Públicos del Museo, ha preparado actividades relacionadas a esta exposición con enfoque en distintos tipos de público, de acuerdo a su edad e intereses. Las reservas ya están abiertas.
Para párvulos y niños con Necesidades Educativas Especiales, se ofrece el taller de experimentación “Primeros trazos en un museo”, actividad de 90 minutos que los invita a experimentar desde el dibujo en gran formato, una composición colectiva cuyo objetivo es acercarlos tempranamente a la complejidad del lenguaje visual y sus posibilidades con las materialidades.
“Abrir el cubo y mostrar las obras”, es un taller de 120 minutos enfocado en niños y adolescentes que llama a pensar e imaginar nuevos espacios para hacer circular las obras recuperadas de Debut. A través de escenarios desplegables, se les invita a construir lugares reales o ficticios desde la pregunta por los vínculos entre artistas y comunidad.
Para el mismo público, “Operación rescate”, es un recorrido conversado que transforma a sus participantes en investigadores durante el proceso recuperación de las 43 obras de la colección. Esta actividad los invita no solo a descubrir y dialogar sobre el valor de la recuperación del patrimonio, sino también a reflexionar en forma activa utilizando su voz, su cuerpo y el espacio, sobre lo que es importante para la comunidad y cómo compartirlo con otros.
“Pirateo de archivos”, es otro recorrido conversado para jóvenes y adultos, quienes son enfrentados a la pregunta, ¿quién o quiénes deciden lo que se conserva en la reconstrucción de una historia? A través del análisis e interpretación del caso de estas 43 obras recuperadas, se les propone intervenir y ficcionar los documentos de sus archivos. La idea, es poner en tensión las relaciones de una red de colaboración entre el museo, los artistas y gestores.
Para más información sobre Debut, sigue este enlace.
Para detalles e inscripciones a las actividades de mediación, pincha aquí.