Facilitado por la artista y fotógrafa Lorna Remmele, este taller teórico-práctico destinado a los y las participantes de la Brigada Fotográfica busca abrir interrogantes y posibilidades creativas del proceso de imagen fija, abordando desde la captura a la posproducción.
“Taller de autoreconocimiento fotográfico” es el nombre de una nueva instancia de aprendizaje colaborativo que, en cuatro sesiones vía telemática, ha sido co- organizada por el MSSA y cuyos contenidos fueron generados luego de recoger los intereses de los miembros de la Brigada Fotográfica.
Este grupo autónomo de fotógrafos y aficionados a la fotografía que nació al alero del programa de vinculación con el territorio del MSSA, les reúne su interés compartir y crear en torno al barrio República. Como es la tónica de su trabajo, se reúnen periódicamente con el objetivo de mejorar su técnica en un clima de aprendizaje colaborativo y horizontal, así como también el trabajo en talleres experimentales. Desde su conformación en 2018, han realizado talleres experimentales con temas como cámara estenopeica con Darcy Rivas, cianotipia con Fabiola Barrera, entre otras, finalizando con obras colectivas y creaciones digitales.
Captura de pantalla de la primera sesión del taller de Lorna Remmele con parte de la Brigada Fotográfica.
El visionado de portafolios de los y las integrantes de la Brigada Fotográfica fue parte del proceso de aprendizaje y colaboración en el taller de Lorna Remmele.
Este nuevo taller está facilitado por Lorna Remmele (Santiago, 1990), fotógrafa y licenciada en Arte, quien colabora desde 2017 en el área de Comunicaciones del Museo, a cargo del registro fotográfico de la Colección, actividades y exposiciones. Su trabajo aborda la pregunta por el cuerpo político, incluida su comprensión más allá de lo humano. Se vincula también con las prácticas performativas desde el 2012 a la fecha. Su trabajo fotográfico y de video ha circulado en muestras colectivas y publicaciones en Chile y el exterior.
«El taller es una instancia que propone potenciar la sensibilidad y el reflexionar desde la mirada, dando prioridad a fortalecer críticamente una propia y a reconocer nuestro ser fotográfico. El ejercicio sensible nos abre puertas creativas más allá de las limitaciones técnicas y materiales, haciendo de la fotografía algo más accesible”, cuenta Lorna Remmele, facilitadora del taller.
En varias sesiones, realizadas durante abril, mayo y junio, los y las participantes experimentaron con la edición en Photoshop, aprendieron a investigar y probar con el autorretrato. Derrotando brechas tecnológicas y de conocimiento, la Brigada Fotográfica co-creó en conjunto en medios digitales, con una actividad reflexiva y crítica.
Actualización: Cierre del taller
Como ejercicio final, cada uno de los integrantes de la Brigada realizó su autorretrato y un/a compañero/a del taller lo intervino digitalmente.
Éstas imágenes fueron instaladas -en una sesión de visionado presencial con medidas sanitarias- a modo de cordelada en la escalera principal de acceso al Museo de la Solidaridad durante junio y julio de 2021. También se realizó una espacio digital de visionado de los trabajos, que puede ser apreciado en esta enlace.
«Soltarse en el autorretrato es una experiencia liberadora. La enseñanza de Lorna fue adecuada y clara. Cuando hicimos la cordelada fue mágico, volver a reunirnos fue lo mejor» contó Carla Cristi en la sesión final del taller.
«La oportunidad de comentar fotografías nuestras con otras personas es enriquecedora. Atreverse a romper los esquemas y entender que hay otras generaciones y profesionales que pueden ampliar nuestra mirada de la vieja escuela», expresó Luis Parraguez.
