En esta exposición, la historiadora del arte y curadora Amalia Cross revisita el movimiento que impulsó a un grupo de artistas a crear y donar obras a la Colección MSSA con el propósito de armar un museo en nombre de la solidaridad. Esta idea revolucionaria se despliega en esculturas, textiles, pinturas, grabados, collages, fotografías, dibujos, performances, poemas, instalaciones, video arte y registros audiovisuales que dan cuenta de una serie de acciones de arte impulsadas por afectos y experiencias que han guiado al MSSA desde un inicio como un museo, también, en movimiento. Las piezas se acompañan de archivos que reflejan la búsqueda por la participación de la sociedad en el arte y de los artistas en política por medio del compromiso y la experimentación.
La exposición –cuyo título proviene de un verso que Raúl Zurita toma de la Divina Comedia de Dante para entender la vida como un viaje– reúne una selección de obras de la Colección del MSSA y piezas en préstamo de artistas que fueron parte de su proyecto. Esta revisión del acervo e historia del museo explora la capacidad que tienen las obras de conmovernos, movilizarnos y suscitar en nosotros un cambio, por sutil que este sea. Porque el arte trata de eso, de transformar la materia, las formas, los afectos y de hacernos partícipes de esa experiencia.
Amalia Cross (Viña del Mar, 1989) es historiadora del arte, curadora y profesora del Instituto de Arte de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Durante su carrera se ha dedicado a escribir, investigar y hacer exposiciones sobre arte chileno. Ha sido curadora de las exposiciones Carlos Leppe, el día más hermoso (MNBA, 2024), El museo en tiempos de revolución (MNBA, 2019) y autora del libro Álvaro Guevara. La tela, el papel y el cuadrilátero (Mundana, 2019), entre otras publicaciones.
Esta exhibición cuenta con el apoyo de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Fundación Henry Moore y Centro Cultural España.